sábado

No volteas.

No voltearás nunca,

y nunca sabrás

cuantos días pasé pegada al monitor, observando tus ojos.

Que mi talón de Aquiles sean los chicos sensibles como tú.

Que mi talón de
Aquiles me haga hacer estupiedeces.

A veces no entiendo como la vida puede seguir sin esta intensidad.


Hay hombres tan peligrosos. Tan peligrosos que no puedo evitarlos.

No entiendo como me emociona tanto.

Y él le escribe cartas a alguien más. Iniciales menos.

Perder la cabeza. Desde hace cinco años no pierdo la cabeza...

No hay comentarios:

Publicar un comentario